Sapiens hizo furor en Silicon Valley en 2015, y con razón, no tiene desperdicio. La estructura básica del libro pivota sobre las que el autor, Yuval Noah HARARI, considera las tres grandes revoluciones de la humanidad.
La Revolución Cognitiva: Hasta hace unos 75.000 años los seres humanos, Homo Sapiens, no eran más que una especie más de simios, entre otras, en una zona muy concreta de África. Según Harari aún no está claro ni como ni por qué, pero en este punto el Homo Sapiens dio un salto cuantitativo enorme en su capacidad cognitiva, sobre todo en la capacidad de comunicarse y de crear y difundir ficción e historias (el dinero es una historia, la religión es una historia, la nación es una historia). Estas historias permitieron agrupar a grandes grupos de Sapiens con objetivos comunes, algo imposible hasta ese momento. Este cambio convirtió a nuestra especie en la fuerza más poderosa sobre el planeta, hizo que se expandiera por todo el mundo y provocó la extinción de todas las demás especies de humanos.
Muy pronto en el libro, explicando la Revolución Cognitiva, aborda un hecho curioso y significativo; el Homo Sapiens pasó a lo más alto de la cadena alimenticia en un periodo muy corto de tiempo y no como resultado de un proceso evolutivo, dejándole lleno de ansiedades e inseguridades por estar en esa posición. Otros animales también en la parte alta de esa cadena evolucionaron durante millones y millones de años para llenar ese hueco, y tanto ellos mismos como el ecosistema en el que estaban tuvieron tiempo de adaptarse (leones, cocodrilos). No el ser humano. De repente el flaquito e inseguro de la clase, al que hasta hacía poco pegaban en el patio, se hizo con todo el poder. De repente. Lo sintetiza describiéndolo como un dictador en una República Bananera.
Pone el ejemplo de lo que ocurrió cuando los primeros Homo Sapiens llegaron a lo que hoy es Australia, hace unos 45.000 años: en solo unos miles de años, el 90% de los las grandes especies de animales se habían extinguido. Similar a lo que ocurrió hace unos 15.000 años en el continente americano cuando conseguimos llegar a través del Estrecho de Bering.
La revolución Agrícola: Hace unos 10.000 años el proceso se aceleró, la capacidad para producir alimento dio a nuestra especie enormes poderes, creamos redes comerciales, construimos ciudades e imperios…
Esta parte tampoco tiene desperdicio, Harari llama al supuesto éxito que supuso esta revolución El Gran Fraude.
La Revolución Científica: Comenzó hace unos 500 años y realmente apenas estamos en su inicio. Una vez más ha multiplicado nuestros poderes como especie. Las dos revoluciones anteriores nos llevaron de ser una especie más, a dominar el planeta y todos los demás seres vivos, la Revolución Científica nos puede transformar en dioses, no metafóricamente, literalmente. La especie humana está ahora mismo en el proceso de adquirir habilidades divinas. Harari compara lo que dice la Biblia; que Dios creó especies animales, plantas y humanos a su antojo, con lo que el ser humano ya está siendo capaz de crear ahora, otros animales, plantas y copias mejoradas de sí mismo según sus propios deseos, como el Dios de la Biblia.
Estamos en el inicio de la que es potencialmente la mayor y más importante revolución en la historia de la humanidad.